Ha costado mucho. “Noches sin dormir, peleas con todo el mundo…”, pero ya ha llegado, como explicó la alcaldesa de Arraya de Oca, Asunción Velasco, por fin hay convenio con el Arzobispado de Burgos para reparar la cubierta de la iglesia que devastó el incendio de diciembre de 2017. Se trata de una actuación parcial, puesto que se centrará en la estructura del tejado y quedaría pendiente el retejado, pero “por lo menos se colocará una lona y el agua y la nieve dejarán de caer al interior”.

Queda mucho por hacer, sin duda, pero este es un primer paso y la alcaldesa quiere agradecer la colaboración de vecinos y foráneos, que se volcaron en las tareas de desescombro, como contó en la televisión local Canal 54 en una reciente entrevista. Ahora pide ayuda para poder acometer todas las obras necesarias en el templo, “nexo de unión entre vecinos y vecinas”, porque el patrimonio de los pueblos es una importante seña de identidad.