El portavoz socialista en el Senado, Ander Gil, participó en la manifestación que se celebró en la capital vallisoletana el 20 de enero y que bajo el título ‘¡Nos duele la sanidad! congregó a miles de personas. Un acto que no quiso perderse más de una veintena de afiliados de Las Merindades -entre los que se encontraba la secretaria de Sanidad Pública de la Comisión Ejecutiva Provincial del PSOE de Burgos e integrante de la Plataforma por la Sanidad Pública en Las Merindades, Celina Pereda-, que no dudó en desplazarse para mostrar su disconformidad con una desastrosa gestión sanitaria que tiene tangibles repercusiones en la comarca.

Como no podía ser de otro modo, numerosos representantes institucionales y orgánicos del PSOE -a la cabeza, el secretario general autonómico, Luis Tudanca- apoyaron con su presencia una protesta en la que consideran que Las Merindades tienen mucho que decir. Explica Ander Gil que son numerosos los ejemplos que justifican la presencia de este territorio en la manifestación. Entre otros, la necesidad de facilitar el acceso al hospital de referencia, en Miranda de Ebro, o de que se incremente el número de pediatras.

La escasez de facultativos en la época estival es otro de los factores que, a juicio de Gil, impiden que se cuente con una atención sanitaria adecuada. Otro problema de relevancia es la necesidad de revisar el convenio con Sanidad del Gobierno vasco, con el que solo existen acuerdos puntuales.

Igualmente es imprescindible reforzar la plantilla, tanto de Enfermería como de médicos/as en las Zonas Básicas de Salud, para garantizar una atención continuada con un adecuado seguimiento de cada caso.

Por otro lado, recuerda Gil que el PSOE considera “imprescindible” contar con una unidad de alta resolución de urgencias en el centro de salud de Villarcayo y una mayor dotación del centro comarcal de especialidades médicas en Villarcayo, así como dar los primeros pasos para un nuevo centro de salud en Espinosa de los Monteros y otro en Villasana de Mena.

Por todo ello, espera que tras la celebración de la multitudinaria protesta, “los responsables de la Junta, comenzando por su presidente, el burgalés Juan Vicente Herrera, dejen de ser ajenos al malestar que está causando su política sanitaria: que es la gestión del recorte y de la privatización”, resume.