La secretaria general del PSOE de Burgos y diputada nacional, Esther Peña, recuerda que el papel de la Junta es “decisivo” de cara a generar empleo de calidad. 

Recalca que de la importancia de esta materia sí es consciente el PSOE. Entre las 370 medidas que hoy ha presentado esta formación -en su  propuesta abierta de un ‘Programa común progresista’ de cara a investir presidente a Pedro Sánchez-, las relacionadas con el ámbito laboral son especialmente necesarias para la provincia y resto de la Comunidad.

Iniciar el diálogo con los agentes sociales para la elaboración de un nuevo Estatuto de los Trabajadores; reforzar el principio de causalidad en la contratación (que la contratación indefinida sea la forma ordinaria de acceso al empleo); revisar la normativa sobre trabajo a tiempo parcial, para prevenir su uso fraudulento, y seguir aumentado el SMI, son algunas de los numerosos y significativos puntos que incluye este documento.

“Es fundamental para Castilla y León la reindustrialización, la creación de empleo -sobre todo, en el medio rural- y el blindaje de servicios públicos”, advierte Peña.

Insiste la líder del PSOE burgalés en que además de las políticas que se impulsan desde el Gobierno central, la gestión del autonómico es “determinante, lo que durante décadas ha olvidado el PP, más cómodo con la reducción de las listas del paro a golpe de éxodo poblacional”.

“Sufrimos un injustificable Ejecutivo autonómico, que no garantiza más que seguir en la línea de obviar esta responsabilidad, que debiera ser su principal preocupación”, lamenta. “Que expliquen los responsables del PP y de Ciudadanos cómo sin trabajo o con uno que no permite ni la más mínima calidad de vida, la ciudadanía de esta tierra puede elegir libremente tener o no hijos, o no irse a otro territorio”, agrega.

En el caso de la provincia el número de desempleados/as en comparación con el pasado año baja en 599, dejando un total de 16.999, pero la cifra se ha incrementado respecto a julio en 450. El tipo de contratos firmados en este periodo (344 menos respecto a 2018 y 3.756 en comparación con julio) confirma la necesidad de seguir trabajando para acabar con la precariedad. De hecho, de los 11.208, solo 755 son indefinidos, el 6,7%. También del total de personas en paro, 9.994 son mujeres, el 58,7%.

En cuanto al número de afiliados/as a la Seguridad Social, se ha producido respecto a julio una bajada, del 0,96%, y un incremento del 0,56% respecto al mismo mes de 2018.