La secretaria general del PSOE de Burgos, Esther Peña, ha vuelto a instar a la Junta de Castilla y León a imitar al Gobierno y asumir su responsabilidad con la protección del empleo. Recuerda que la competencia es autonómica y critica que, sin embargo, frente al esfuerzo de la Administración central, que mantiene el ERTE a 5.000 trabajadores de la provincia y ha ayudado a 3.000 autónomos en el último mes, la Junta condena al “abandono” a pymes y trabajadores por cuenta propia y ajena.

 

En una jornada de trabajo en Pradoluengo, en donde, junto al secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, y la senadora Mar Arnaiz, ha arropado al alcalde, ante el progresivo desmantelamiento de servicios públicos competencia de la Junta en la zona, Peña ha arremetido contra la desidia de la Administración que preside Alfonso Fernández Mañueco.

 

A pesar del balance “positivo” que ha realizado de los últimos datos del paro, que indican que 500 personas encontraron trabajo en la provincia en marzo, la también diputada nacional ha subrayado la necesidad de que la Junta destine al menos 165 millones en ayudas directas a los sectores más afectados por las medidas para frenar la pandemia.

 

Sostiene Peña que el Gobierno “está haciendo la tarea” y cita, a modo de ejemplo, que los pequeños negocios con menos 10 personas en plantilla van a poder tener al menos una ayuda directa estatal de 3.000 euros. Y, si cotizan por módulos o por estimación directa y pueden demostrar que han tenido péridas en útlimos meses, van a poder acudir a ayudas directas de hasta 200.000 euros. 

 

“En eso está el Gobierno de España, en ayudar a trabajadores y a las pymes que necesitan apoyo. Por eso, hoy vamos a hablar de fondos europeos, de ayudas, de matenimiento de servicios públicos en el medio rural”, ha recalcado, y ha destacado los 400.000 euros que el Ejecutivo central  ha puesto a disposición del plan de extensión de banda ancha en este municipio burgalés.

 

En esta jornada de trabajo, la secretaria general del PSOE de Burgos ha recordado los continuos recortes en servicios públicos que la Junta ha realizado en los últimos años en Pradoluengo y su comarca. Desde el intento de supresión de las guardias médicas nocturnas, hasta la obigatoriedad para su habitantes de desplazarse hasta el centro de salud de Belorado para recibir la vacuna contra la covid, ademá de recortes en educación y transporte interurbano.

 

“El último golpe que asesta la incompetencia de la Junta a este municipio y comarca es el relativo al servicio de prevención y extinción de incendios y los parques de bomberos voluntarios”, ha dicho en relación al reciente anuncio de que la Administración autónomica pretende suprimir 8 de los 19 existentes en la provincia. Pradoluengo, como ha lamentado su alcalde, el diputado provincial Antonio Araúzo, será una de las localidades que lo perderá, según estas previsiones.