El secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, defiende que la Junta de Castilla y León mantenga el concierto con la orden religiosa propietaria del hospital San Juan de Dios hasta que el hospital Divino Valles pueda acoger los servicios de este centro en cuidados paliativos y hospitalizaciones de media y larga estancia. Entiende que el Hospital Universitario de Burgos no puede garantizarlos sin perjudicar su propio funcionamiento y la calidad asistencial, además de que supondría un nuevo incremento del canon que la Junta paga a la concesionaria. Recuerda también que la inversión que ahora promete el PP para acondicionar el antiguo hospital provincial debió estar concluida cuando se inauguró el HUBU.

 

En todo caso, duda de la voluntad real de la Junta de invertir los 850.000 euros que promete para 2022 en el Divino Valles, puesto que la semana pasada el PP tumbó en las Cortes de Castilla y León una enmienda del PSOE para incorporar al presupuesto General de la Comunidad de 2022 800.000 euros a dicho cometido.

 

En una comparecencia junto a la secretaria general del PSOE de Burgos, Esther Peña, y el  portavoz de Sanidad del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León, Jesús Puente, Tudanca criticó el anuncio de inminente resolución del convenio el próximo 31 de diciembre y el consecuente cierre del centro privado que ha prestado esos servicios durante más de 60 años, sin una alternativa que garantice la calidad asistencial en esta área.

 

“La Junta de Castilla y León tiene que ofrecer los servicios de cuidados paliativos y de media y larga estancia en las mismas condiciones de calidad que hasta la fecha a partir del 1 de enero”, insistió y, para incidir en ese objetivo, anunció que el Grupo Socialista presentará iniciativas en este sentido en las Cortes autonómicas.

 

En su opinión, “hemos llegado a una situación de no retorno y chapuza en la gestión que, además, se va a llevar por delante a casi un centenar de trabajadores cualificados y que han prestado un magnífico servicio”. Y este punto de no retorno se debe, fundamentalmente, a la mala gestión de la sanidad del Gobierno autonómico del Partido Popular y Ciudadanos, “que compartirán culpa, pero no toda es atribuible al nuevo socio de gobierno, sino a quien lleva gestionando la  sanidad en esta tierra desde hace más de veinte años”, el PP.

 

Para Tudanca, “la sanidad pública de Burgos no tiene ninguna esperanza con los actuales gestores- PP y Cs- y “necesita un cambio de rumbo al frente de la Junta de Castilla y León. Cita, a modo de ejemplo, los “recortes” y apuesta por la privatización que, a su juicio, caracterizan la gestión sanitaria del PP, así como el reciente revés judicial en contra del intento de prejubilar, en contra de su criterio, a un oncólogo del Hospital Universitario de Burgos, (HUBU).

 

El líder del PSOE de Castilla y León deseó “acierto” a la nueva gerente del hospital “privatizado” de Burgos, no sin recordar que tuvo que dimitir en 20167 como directora médica,tras admitir la manipulación de las listas de espera quirúrgicas del complejo asistencial burgalés.Una situación similar, ha recordado, a la que admitió el hoy procurador de Por Ávila y ex director del complejo asistencial abulense. Una coincidencia que acredita, dice, que los responsables del Partido Popular “siempre premian y ascienden a los responsables de manipular listas de espera”.