La Diputación Provincial de Burgos cierra el ejercicio de 2021 sin aprobar las bases de la convocatoria de subvenciones de los Planes Provinciales, las más importantes que reciben los pueblos y las más esperadas. El viceportavoz socialista, Javier Lezcano, lamenta que esto supondrá que, un año más, las ayudas lleguen tarde y perjudiquen a las localidades, que acaban adelantando el dinero de las obras subvencionadas y financiando a la Institución provincial. Por eso, ha animado al equipo de gobierno a someterlas a la aprobación del próximo Pleno, previsto para el 14 de enero de 2022.

 

El Pleno extraordinario de hoy ha aprobado definitivamente el Presupuesto de 2022  de 137,6 millones y que crece gracias a la aportación del Gobierno (un 13% más con respecto a 2021), sin esclarecer la convocatoria de estas ayudas, para las que el PSOE defendía que se abonaran íntegramente en un pago, en lugar del adelanto del 60% en un ejercicio. “No entendemos por qué no se puede hacer, cuando el equipo de gobierno insiste en que existe crédito en la Diputación”, ha lamentado Lezcano.

 

El diputado provincial socialista ha calificado las cuentas de 2022 como las de “las apatía y el hastío”, sumidas en la inercia del PP de los últimos lustros, en la que ahora ha entrado su socio de gobierno, Ciudadanos.

 

También ha recordado que el equipo de Gobierno rechazó las enmiendas del Grupo Socialista, por algo más de un millón de euros, aunque el Presupuesto sí incluye dinero para algunas de las aportaciones que el PSOE realizó en este 2021, como las medidas contra la exclusión financiera o un plan de ruinas que ayude a los municipios afectados en la gestión de este tipo de expedientes. Dos iniciativas aún incipientes y, según Lezcano, con escasa dotación, cuya evolución seguirá de cerca el Partido Socialista.

 

Entre las razones que Lezcano arguye para hablar de continuidad de estas cuentas, se encuentran la ausencia de las convocatorias específicas de Cultura para fiestas patronales o para el ciclo integral del agua. También ha criticado que la Diputación fía a los remanentes de 2021 un Plan de Instalaciones Deportivas el próximo año y la mala gestión del equipo de gobierno provincial, que le ha hecho perder 380.000 euros de la Junta para contratar trabajadores de las brigadas forestales, la paralización desde hace dos años del centro de recepción de visitantes de Clunia y la prometida, pero aún pendiente, valoración de los puestos de trabajo de la Diputación.

 

Finalmente, el Presupuesto se ha aprobado definitivamente con el voto a favor del PP y Cs y en contra del Grupo Socialista, de la diputada Mar Alcalde y de Vox, que ha tachado las cuentas de socialcomunistas por atender a la Agenda2030.